Apoyamos la transición energética

Los componentes de un sistema de calefacción o refrigeración están constantemente expuestos al desgaste debido a las impurezas presentes en el agua. 
Este riesgo es especialmente crítico en los sistemas de bomba de calor ya que, al ser más delicados, las impurezas pueden obstruir los pasos internos, ya pequeños de por sí, e impedir el correcto funcionamiento de los dispositivos de regulación interna, disminuyendo su caudal.

El uso de un filtro desfangador magnético y del acondicionamiento químico obligatorio con aditivos específicos garantiza una calidad del agua superior.

 

Tubos ruidosos, caudales insuficientes, bloqueos totales de la circulación, intercambio de calor deficiente y corrosión de los componentes metálicos son los problemas más comunes que pueden surgir cuando hay aire dentro de un sistema.

Por eso es esencial utilizar un separador de aire de alta eficiencia diseñado específicamente para sistemas de bomba de calor.

Las nuevas tecnologías, cada vez más orientadas a la protección del medioambiente, requieren importantes inversiones y, por lo tanto, es importante garantizar su completa protección y duración en el tiempo. En los sistemas monobloque o hydro-split, el circuito hidráulico tiene un tramo externo que conecta la máquina con el resto del sistema y que, aunque sea corto y esté bien aislado, puede estar expuesto al riesgo de heladas en condiciones particulares, como, por ejemplo, si se producen apagones eléctricos con temperaturas bajo cero.

La válvula antihielo protege el sistema de bomba de calor contra la formación de hielo, sin disminuir las prestaciones, sin consumir electricidad y sin tener que usar anticongelantes que son contaminantes.
 

La bomba de calor debe seguir funcionando incluso después de que los termostatos manden su apagado. Esto es fundamental, sobre todo en las épocas más frías del año, porque permite eliminar la energía residual presente en el compresor y activar el ciclo de descongelación del intercambiador (defrosting). En estas situaciones, la máquina requiere un suministro constante de energía térmica y una mínima circulación de agua.

En los sistemas de baja inercia, el volumen inercial adicional es indispensable para garantizar la energía térmica y permitir la circulación del agua incluso en caso de zonas total o parcialmente cerradas.